Amante Consagrado...by J. R. Ward

23/2/14

Amante Consagrado (La Hermandad de la Daga Negra VI), de J. R. Ward

DATOS DEL LIBRO:
Nº de páginas: 592 págs.
Encuadernación: Tapa blanda bolsillo
EditoralPUNTO DE LECTURA
Lengua: CASTELLANO
ISBN: 9788466322140
Precio: 8.99€

SINOPSIS:
Extremadamente leal a la Hermandad de la Daga Negra, Phury no ha hecho más que sacrificarse por el bien de su raza, convirtiéndose en el hermano que tendrá que perpetuar el linaje de su Hermandad. Como el Gran Padre de las Elegidas, está obligado a ser el progenitor de los hijos e hijas que asegurarán la conservación de las tradiciones de la raza y que haya futuros guerreros para que luchen contra aquellos que quieren la extinción de los vampiros.



Mientras, la intención de la Elegida Cormia, su Primera Compañera, no es sólo ganarse su cuerpo, sino también su corazón, aunque para ella sola... Se siente muy atraída por la noble responsabilidad que se esconde tras el macho emocionalmente herido. Pero Phury nunca se ha permitido conocer el placer o la alegría. A medida que la lucha contra la Sociedad Restrictiva se recrudece, la tragedia se cierne sobre la mansión de la Hermandad, y Phury tendrá que decidir entre el deber y el amor…
He de reconocer que, aunque tenía curiosidad por conocer la historia de Phury, sin embargo, era uno de los hermanos que menos me llamaban la atención. ¡Qué equivocada estaba! La sexta entrega viene cargada de muchos dramas personales, problemáticas (que son como la vida misma) y una trama cada vez más compleja.

Phury, el hermano gemelo de Zsadist, el héroe, el caballero de brillante armadura...resulta que no lo es. ¡Menuda sorpresa me he pegado con Phury! Y ha sido una sorpresa agradable y un cambio más agradable aún. Hasta los que parecen ser héroes y hombres perfectos, distan mucho de serlo. 

Phury, el hermano gemelo de Zsadist, el bondadoso, el caballero de brillante armadura, el hermano más cabal y centrado de todos...tiene una oscuridad interior que nadie ha alcanzado a ver hasta ahora. Perdido en la agonía de estar enamorado de la shellan de su hermano, Phury no aguanta más el sufrimiento y, además de ahogarse en el humo rojo del cual es adicto, acaba aceptando el puesto que inicialmente había sido designado a Vishous como el Gran Padre de la raza. Sus motivos para tomar tal decisión al principio son egoístas, pues ve en esa decisión la oportunidad de escapar de la casa de la Hermandad, de los hermanos que le miran con compasión y preocupación y de la mujer que nunca podrá tener. La espiral de autodestrucción en la que se ha envuelto cada vez es más grande y potente, su adicción es cada vez más fuerte y se ha vuelto un ser sanguinario en lo que respecta a su lucha con los restrictores. Nada parece paliar la agonía que siente y encima sus hermanos le rechazan por el camino que está tomando. Sin ninguna duda, la vida para Phury no ha sido fácil, siempre cargando con la responsabilidad por todo lo que le sucedió a Zsadist en el pasado y entregándose por el bien de la raza. Pero sus días como salvador y héroe se han acabado. Su camino está oscuro y cae en las profundidades de su agonía y de su debilidad. Así que, cuando acepta ser el Gran Padre, en lo que menos piensa es en sus responsabilidades como tal. La primera noche, cuando conoce a su Primera Compañera, se escandaliza al verla como una ofrenda, un cacho de carne en el cuál él debe poner su semilla. Así que se revela, y se lleva a la Elegida consigo a la mansión de la Hermandad sin saber muy bien qué hacer. 

Ya no sabe qué hacer con su vida. Su adicción le arrastra y sus hermanos le repudian. La mujer a la que desea es la shellan de su hermano y la mujer con la que tiene obligaciones como Gran Padre está con él por obligación. 

Cormia, es la Elegida y Primera Compañera del Gran Padre. Su principal función es la de ser la primera amante del Gran Padre y recibir su semilla para traer una nueva generación de vampiros. Nunca se ha sentido como las demás Elegidas y siempre ha tenido inquietudes y deseos que no debería tener. Así que, cuando es asignada como Primera Compañera, se siente aterrorizada por el futuro que la espera. Cuando conoce a Phury, está atemorizada pero ante la reacción de éste, no puede evitar sentirse sorprendida y agradecida. Una vez en la mansión, sus temores se disipan y sus propios deseos comienzan a florecer y, ahora, desea estar con el Gran Padre con todas sus fuerzas y de la manera como deberían haber estado la primera noche que se conocieron. Pero el tiempo pasa, y Phury apenas la mira ni habla con ella, y Cormia se va marchitando cada vez más, perdida en su confusión y en un futuro donde es rechazada por no haber cumplido con su deber hacia la raza y hacia el papel que representa con las Elegidas. Sus sentimientos por Phury, un hombre que desea a otra mujer, se van haciendo cada vez más profundos e intensos y sus deseos por ser otra persona también se van haciendo cada vez más grandes.

Sin embargo, a medida que Cormia se desenvuelve en un mundo totalmente desconocido para ella y va saliendo de su caparazón como Elegida, Phury también va descubriendo a la mujer que hay en ella y sus sentimientos comienzan a cambiar y a hacerse posesivos y amorosos. Y, a pesar de que sus lazos parecen estrecharse y ellos comienzan a compartir cosas y momentos muy pasionales juntos, el deber de Phury como Gran Padre y la situación crítica en la guerra con los restrictores, le hacen tomar una decisión que apartará a la mujer a la que realmente ama de su lado.

La Sociedad Restrictiva tiene ahora una nueva arma...mortífera y que sorprenderá a la Hermandad. Sus filas se endurecen y sus acciones son terribles, haciendo que el tranquilo mundo de la glymera explote y se vea terriblemente afectado.

J. R. Ward nos trae una entrega donde la historia se recrudece cada vez más, la tensión, el dolor y el drama explotan por todas partes y nuestros personajes tendrán que hacer frente a los problemas con todo lo que tienen. El argumento se complica y las piezas del ajedrez de esta historia ya han hecho sus primeros movimientos...El destino de la raza se acerca y el Omega presentará una nueva arma que hará que el mundo de nuestros Hermanos se tambalee y peligre. Pero la Hermandad no dejará de luchar para salvar a su raza.
En un mundo que convulsiona, cada personaje y cada papel empieza a encajar, aunque no sabemos cómo acabará la cosa. Este libro está lleno de preguntas, miedos, temores, problemáticas intensas - como la adicción de Phury y el camino de autodestrucción en el que se embarca - descubrimientos personales, dudas, actos impulsivos y con terribles consecuencias, mucho dolor y también un amor que supera barreras. Los personajes son cada vez más complejos y realistas y la trama principal de la saga va haciéndose cada vez más consistente, expandiendo sus ramas en forma de consecuencias y caminos inciertos que deberán andar nuestros personajes. Si bien es verdad que la historia entre Phury y Cormia podría considerarse como una de las menos intensas de todas las que hemos presenciado, no deja de maravillar y de guardar mucho significado. Ambos personajes se redescubren el uno en el otro y acaban encontrando el camino que los llevará a permanecer juntos. 

¿El final? Sin duda se trata de uno de los mejores finales que he leído a lo largo de la saga. Más allá de las consecuencias que habrán de hacer frente los personajes debido a las decisiones que han tomado y que cambiarán su mundo, nos encontramos con un final agridulce, intenso y tremendamente hermoso. Me ha emocionado inmensamente.

BRAVO a la autora por una saga de calidad, magistralmente escrita, con un estilo fresco un ritmo ágil que es capaz de alternar distintos puntos de vista sin hacer perder unicidad a la historia, un modo de narrar exquisito sin resultar sobrecargado y unos personajes que harán las delicias del lector. 

"Puedo detenerme" dijo él, con voz vacilante "Cuando quieras..."
"¡No!" dijo Cormia y lo agarró de los hombros, para evitar que se alejara. Aunque no sabía qué iba a pasar después, sentía que era algo que necesitaba, fuera lo que fuese.
Los labios del macho subieron por su cuello y se detuvieron en la barbilla. Y en el momento en que él presionó su boca contra la de ella, Cormia sintió un ligero roce que bajaba por su vestido...

...Cormia se derritió entre sus brazos, mientras su intimidad se ponía cada vez más húmeda y ardiente.
Phury deslizó la mano hacia abajo.
"Creo que debo asegurarme de que no estés pasando frío."
"Por favor...adelante" gimió ella, mientras dejaba caer la cabeza hacia un lado.
Phury no estaba seguro de que ella hubiese expuesto su garganta a propósito, pero a sus colmillos no les importó. Inmediatamente se prepararon para penetrarla, brotando desde el maxilar superior, afilados y ávidos de sangre.
Phury le metió la mano entre las piernas y el calor húmedo con que se encontró casi lo hizo desmayarse. Tenía la intención de ir despacio, pero enseguida desistió de ese propósito.
"Ay, Cormia" 
...
Tan pronto sus colmillos rasgaron la dulce piel de Cormia, ella apretó los brazos sobre sus hombros y agarró con fuerza su camisa entre los puños.
"Te amo..."

Pero, sobre todo, experimentó la sensación de unión que brotaba del amor que se tenían el uno al otro.
No podía recordar haber tenido nunca una sensación tan real, tan vívida.
Era el premio de la recuperación, pensó. La capacidad de vivir plenamente ese momento con la hembra que amaba y estar totalmente consciente, presente y alerta. Sin que sus sentidos estuviesen perturbados por ninguna sustancia.
...

Sí. Maldita sea...sí.
Así que Phury comenzó a moverse de nuevo, jadeante y sobreexcitado, a veces dando y otras veces tomando, mientras sentía que, al tiempo que los dos llegaban juntos al orgasmo, la vida hervía dentro de él...y se sentía vivir de verdad. 
Mi puntuación:

La saga de La Hermandad de la Daga Negra se compone de:

1. Amante oscuro - Reseña

2. Amante eterno - Reseña

3. Amante despierto - Reseña

4. Amante confeso - Reseña

5. Amante desatado - Reseña

6. Amante consagrado

7. Amante vengado

8. Amante mío

9. Amante liberada

10. Amante renacido

11. Amante al fin

Guía secreta de la Hermandad de la Daga Negra.

Saludos,


Las increíbles ilustraciones pertenecen a Anyae

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